Four days to go...

Hace nada más y nada menos que medio año se nos ocurrió la magnífica idea de viajar. Y como ello está bastante por encima de la altura de nuestros nulos ingresos, decidimos lanzarnos a la aventura.

Así, el 17 de Marzo estaban a nuestro nombre tres billetes de ida... con vuelta para dos meses más tarde. Y nada más.

Con un miembro menos en nuestras filas, comenzamos la búsqueda de hostales, trabajos, residencias, más trabajos, pisos, más trabajo... Pero a esas alturas del año de poco servía, había que esperar. A mediados de Junio encontramos una residencia que según nuestras ilusiones nos salvaría el culo, pero no podíamos confirmar nada hasta unos días antes de viajar.

La primera buena noticia llegó a mitad de Julio. ¡Tenemos una beca! Un trabajo menos que buscar, al menos.

Pero como la alegría no podía durar eternamente, a finales de Julio y a las puertas de empezar la aventura, la residencia en la que confiabamos poder vivir nos confirma que está totalmente llena y es prácticamente imposible que nos dejen alojarnos en ella.

Lo único que pudimos encontrar va a ser la primera aventura dentro de nuestra pequeña gran hazaña: convivir durante una semana en una habitación de 12 personas desconocidas. Tal vez así nos demos más prisa en encontrar piso -.-"

Ahora sólo quedan 4 días, y nada más.